'Mirindas asesinas' es una excepción en el patrio mundo artístico casposo-hilarante-surrealista. Si Pérez-Reverte dice que hay que leer a Valle-Inclán y Galdós para conocer las profundidades del extravagante ser hispano, hay que ver a Álex de la Iglesia para adentrarnos en el hilarante éter lisérgico de los fotogramas patrios. 'Mirindas asesinas' es un clásico en un país donde los cortometrajes no son más que cintas breves que nadie ve y que solo sirven para rellenar certámenes más o menos creativos.
En 1991, cuando se empezó a hablar del corto, lo fue por su atrevimiento y su brutalidad sin sentido, a lo 'Perros de paja' manchegos: muertos por doquier, no por celos, por robo u odio... asesinatos salvajes porque en el bar le querían cobrar la 'mirinda bien fría'. Después llegarían las obras maestras de De la Iglesia, siempre pobladas de frikis y seres peculiares, por no decir sonados, como los clásicos: 'Acción mutante' y 'El día de la bestia' Una bebida que tampoco sobrevivió al imperio de la coca-cola y los brebajes energéticos.
Si hay un programa de medianoche kitsch por excelencia, superando incluso a los engendros del frikismo elaborados por Pepe Navarro y Sardá, ese es/fue 'Contacto con tacto' del inefable amigueteBertín Osborne. Una cita a ciegas entre personas en celo máximo que lo que menos tenía era tacto.
Emitido en 1992, si se hubiera topado con él un marciano en misión colonizadora en la Tierra, se habría largado como alma que lleva el diablo. "Estos terrícolas están locos", habría pensado. Pues no: solo somos frikis en grado sumo. Y eso no es poco ante la tremenda competencia que se da por estos lares. El programa, patrocinado por 'Blanca de Navarra', marca de licores de frutales diversos, superaría a cualquier friki del top ten: estaba por encima de Pozí cuando se lanzaba desde un trampolín a 20 metros de altura embutido en un traje de faralaes o a 'Fat'Falete incrustándose una falda de Zara talla 30. En más de una ocasión, viendo a Bertín repatingado-espatarrado en el sillón orejero, pensé que ya no quedarían para nunca jamás nuevas existencias de Blanca de Navarra, consumidas en el calentamiento previo al programa por su presentador.
La verdad es que el cantante metido a presentador estaba enorme. En dos palabras: In-menso. Se equivocaba en los nombres, trastabillaba alguna frase, introducía el comentario picante en el momento justo... Vamos, que un crack que, además, disfrutaba de manejarse entre la fauna salvaje que asistía al plató de Tele 5. Se trataba de que un chico eligiera a una chica entre tres aspirantes. Los cuatro seres humanos (?) ya mostraban maneras de posibles concursantes de Gran Hermano, diez años antes de su existencia. La cabecera, surrealista y amenizada por 'Two hearts' de Phil Collins, ya invitaba al descojonamiento posterior. En cierta ocasión apareció uno con aspecto de aprendiz de macarra que se refirió a su ocupación como "clasificador de ambientes" (era un 'puertas' cualquiera). Bertín se descojonó y le largó: "O sea que tú eres el que dice: 'tú sí entras y tú no entras: así clasificas los ambientes". Y se quedó más ancho que largo descoyuntado en su interminable diván. PD: Fue la delicia de nuestras noches sardañolinas -después del inevitable vodka Ceremonial del Bar Alaska, junto al Riu Sec- esperando que Gurb volviera a aterrizar en Cerdanyola en forma de Marta Sánchez.
FBI, acrónimo del siempre legendario Federal Bureau of Investigation, en la España cañí, de la Lola, los churumbeles y el paquete de Ducados bajo la tira de la camiseta imperio, significa, nada más y nada menos que: Frikis Buscan Incordiar. Su padrino -el de los mfrikis hispanos-, Javier Cárdenas, maestro de ceremonias de 'Al ataque' y 'Crónicas marcianas', auténticos hogares de nuestros monstruitos patrios, quiso ir más allá. De tal manera que hizo una película, 100% Cárdenas.
En el filme casi se carga a Paco Porras (la broma por poco acaba con 'el rey de los nabos' con clavícula y castillas rotas). La broma a El Arlequín -que acaba golpeando a Cárdenas- es antológica. Lo mismo que el sketch a la Bruja Lola, quien desde entonces enciende una vela negra diaria acordándose de los familiares del ahora presentador de radio. Tampoco tiene desperdicio la tortura que a decenas de metros del suelo aplica el cómplice-friki de Cárdenas, un crecido Carlos Pumares que se ceba en una concursante de Gran Hermano, con pavor a las alturas. Pumares entra en la categoría de friki por sus salidas de tono y por haber protagonizado uno de los momentos más desternillantes de la radio española (con permiso de Gomaespuma). Fue cuando, en 'Polvo de estrellas', intentó que una ama de casa gallega escribiera Fibergran. No lo logró. Pero la grabación es antológica. Por cierto, al ya desaparecido Pozí, que siempre y lascivamente tocaba el culo a Cárdenas, le gasta una broma inocente, pero que igualmente provoca en el público las carcajadas más salvajes.
Los frikis hispanos siempre han existido. Y, si no, se han creado. El mejor ojo para ello ha sido el de Santiago Segura (Torrente). Segura los ha llevado a su expresión máxima. Probablemente el 90% de los frikis patrios han actuado o han gozado de un cameo en alguna de su películas. Porque el 'landismo' no murió con el genial Alfredo Landa. Se trata de un virus demasiado poderoso para desaparecer. Es como las cucarachas: no las matas ni con la bomba atómica. El 'landismo' se ha visto sustituido en el siglo XXI por una cepa mucho más resistente: el torrentismo. Si ya de por sí, José Luis Torrente, el brazo tonto de la ley, es el ser supremo en el mundo de los frikis, sus aristas invitados le van a la zaga.
Cañita Brava. Sin reconocimiento social ni televisivo tras el hundimiento de 'Un, dos, tres' fue reflotado por Segura en 1998 como secundario de peso en la primera parte de la saga: 'Torrente: el brazo tonto de la ley'. Genial como camarero que echa a Torrente del bar por moroso y gorrero. "Me debes 5.000 pesetas en wiskies, Torrente". Una frase que, según el director, le costó decenas de tomas para memorizar.
José Luis Moreno. Si bien no se le puede catalogar de 'friki castizo', su trayectoria como productor y director de bodrios como 'Noche de fiesta', 'Sábado sensacional' y 'La alfombra roja palace' certifican que es más que digno integrante de esta sección. Además, un hombre que mueve, habla y hace hablar a muñecos con bigotes, boina y pelos en las piernas...es un perfecto friki. Segura lo recicla como malo malísimo (hasta le muerde su mono y lo mata a golpetazos contra una mesa) en 'Torrente 2: Misión en Marbella'. No tiene desperdicio la risa falsa de este émulo del Doctor No. Jesulín de Ubrique. Probablemente uno de los mayores frikis de España. No en vano, es el creador de uno de los más infames personajes de la telebasura patria: su ex Belén Estebán. A lo que hay que unir unos padres muy particulares, una corrida solo para mujeres (sigue en el imaginario popular las decenas de bragas y sostenes que le lanzaron las 8.000 allí congregadas) y su etapa como principal activo en programas míticos como 'Esta noche cruzamos el Mississippi' con su mascota, el tigre 'Currupipi'. Jesulín, resucitado por Segura para 'Torrente 5: Operación Eurovegas', como su compañero friki (antes lo fueron Gabino Diego, José Mora y Paquirrín), también se superó en el friquismo cuando intentó alcanzar la fama de croner con el pegadizo tema -y esto va en serio- : 'Toda', popularmente conocido como 'Toa, toa, toa'.
Paquirrín, dícese de Kiko Rivera Pantoja, es la versión simpática de Belén Estebán. Solo un peldaño de frikismo por debajo de la Princesa de las Cocletas y el Pollo Empanao, el pequeño del torero Francisco Rivera 'Paquirri' es otro de los 'monstruitos' patrios fichados por Segura para hacer lo que mejor saben: practicar el 'cañita brava' las 24 horas del día. Paquirrín, también a la altura de David Guetta manejando los platos de Ushuaia, fue el compañero friki de Segura en 'Torrente 4'. Un chaval simpático, que cae bien, que mola, pero que no deja de ser un juguete mediático.
Si en el imaginario patrio ha habido un personaje clave entre los seres extravagantes (por no decir más locos que un cencerro) ese ha sido Carlos Jesús y sus múltiples personalidades, desde Cristofe hasta Micaé, pasando por Andachán, señor de Raticulín, equina con Ganímedes. Este brutal derroche de surrealismo garrulo y casposo se lo debemos al tío de los frikis en España (el padre, con merecimiento, es Santiago Segura): Javier Cárdenas, quien los hizo coincidir en la desternillante película FBI (Frikis Buscan Incordiar) donde, por cierto, casi deja paralítico a Paco Porras, el esquiador sobre arena. Cárdenas se fue día y medio a grabar a un visionario vestido como Demis Roussosdespués de Woodstock o tras una ingente fumada de opino en Saigón, llamado Carlos Jesús, un sevillano poseído por varias personalidades, a cual más bestia. Gracias al entonces cuñado de Alfonso Arús pudimos disfrutar en 'Al ataque' (1992-93) y en 'Crónicas marcianas' de las locuras de Carlos Jesús y su inolvidable latiguillo de guerra: "Chiu, chiu" y a su grito hipohuracanado destinado a romper los "quittrale" (cristales, en versión terreste). En definitiva, unos de los momentos gloriosos de la telefriki apañola.
"Voy a dejar estas bolsas en la cocina y luego te cuento una historia que te va a dejar las pelotas arrugadas como pasas", dice Spike, cuando entra en casa, se cuela entre Hugh Grant y Julia Roberts, y desaparece en el interior de la vivienda azul del barrio londinense de Notting Hill. (Ver enlace). "Imagínese a la persona más estúpida que haya conocido... multiplíquelo por dos... ese es el especimen que vive conmigo", explica Grant, en el personaje del librero William Thacker, a un recepcionista de hotel.
Spike, galés alérgico al agua y al trabajo, es una mezcla entre Neil, de The Young Ones, y un hippie pasadísimo en es Vedrà en plena puesta de sol. Spike:"Este yogur sabe raro". Hugh Grant:"No es un yogur; es mayonesa" (Ver enlace). Una mañana lo ve vestido de buceador, andando tan pancho por la cocina, como si fuera De Gea antes de saber que Van Gaal será su próximo entrenador. Grant le pregunta por qué va con estas pinras, gafas de pesca incluidas. "Por qué vas vestido así", le inquiere. Y el piojoso personaje responde: "Por una combinación de factores... tengo la ropa ropa sucia". Grant:"Siempre la tendrás así si nunca la lavas". (Ver enlace)
Spike despierta a medianoche a Grant y le habla de Julia Roberts, que duerme en la habitación de al lado. "Ha roto con su novio y esta en tu casa... y os lleváis muy bien... Y no crees que es una buena oportunidad para tirártela" -Spike, lo esta pasando fatal; eres un salido. -¿Te importa que lo intente yo?
Este auténtico troglodita, friki, cachondo, pirado e inofensivo protagoniza una de las escenas más desternillantes en la historia del cine. Es cuando abre la puerta para que decenas de periodistas, que hacen guardia frente a la casa para pillar a la pareja, le graben imitando posturas de Míster Universo. Genial! Brutal!
Alfredo Díaz (www.alfredodiaz.es) convierte a Mark Lenders en Marcos Heredia, un calorro granaíno con mucho arte. Momentos 'Viva España', 'Mama, ya no me compro gallumbos blancos' y 'Ser español es respetar la diversidad, la butifarra catalana y la paella valenciana', de los mejores.
' Oliver se fue a casa acojonado, se dedicó a insultar a Marcos en las redes porque cara a cara es un acojonado'. Inmemso final.
